Buses Scania Novali:

los caminos de la sostenibilidad

 

 

Los paradigmas del transporte cambian velozmente y prácticamente nadie del sector pone en duda que nos encontramos en un momento de veloz evolución y cambio. En este escenario que falta por consolidar, las soluciones son múltiples y las dudas cada vez más; por eso, Scania lanzó su nueva línea de buses llamada Novali, que apunta a ofrecer certezas y no dudas frente al transporte de pasajeros del futuro inmediato.

Porque la nueva generación de buses del fabricante sueco es sostenible en el más amplio sentido de la palabra, mucho más allá de sus claros aportes medioambientales, también se trata de productos desarrollados tanto para el transporte de pasajeros urbano, aspecto crítico en toda Latinoamérica y en particular en Chile; además de cubrir los viajes de larga distancia, espina dorsal de los viajes en nuestro país.

El foco que elige Scania para desarrollar su nuevos buses Novali, es la versatilidad en los propulsores y en las soluciones en cada una de las aplicaciones, prometiendo no sólo reducir la huella de carbono de su operación, sino además ofrecer altos niveles de reducción en el consumo de combustible, en torno al 8%, al 10%, comparado con anteriores generaciones de Scania.

Múltiple sostenibilidad

Si bien la casa del grifo, Scania, ya cuenta con múltiples soluciones de buses eléctricos, entre ellos la solución urbana Citywide; también es plenamente consciente de las problemáticas e incertidumbres que la electromovilidad en muchos países de latinoamérica aún no logra disipar.

Y no son pocas: en larga distancia, las autonómicas están lejos de lo deseable con baterías; los puntos de carga también son otro tema crítico, sin contar que para que realmente sea una aporte al medioambiente, la base energética del país debe también ser limpia.

En este escenario es que Scania Novali apuesta por ofrecer amplia versatilidad con vistas al cuidado del medio ambiente, pero sin olvidar la sostenibilidad del negocio en el corto, mediano y largo plazo, así con una batería de soluciones más prácticas, ofrece toda una gama de soluciones para las ciudades y para la carretera. 

Múltiples motores

Para el desarrollo de la nueva gama Novali, Scania plantea tres pilares: el cuidado medioambiental, el foco en las personas, tanto conductores como pasajeros; y la solvencia de la empresa como operación. 

Así, y considerando todo el espectro de mercados de latinoamérica, los nuevos buses de Scania ofrecen varias alternativas en motorización, con el más convencional motor diésel con normativa Euro 6; y soluciones que prometen una reducción de consumo de combustible de entre el 8 al 10% de combustible.

Pero no es todo, también incluye soluciones que ya cuentan con infraestructura instalada como el Gas Natural, el Biogás en base a metano; el biodiésel (muy abundante en países como Brasil o Argentina). La idea, para Scania, es múltiples soluciones, todas con rebajas importantes en consumo y sobre todo en reducción de emisiones. En la marca están claros que si bien las metas de penetración de vehículos eléctricos son ambiciosas, en 2030 más del 90% del parque rodante seguirá siendo a combustión. 

Múltiples soluciones

En lo técnico, la nueva gama de buses Novali,  de Scania, se divide en los chasis para el entorno urbano, y los de larga distancia.

Los primeros, se componen de nuevas estructuras en sus largueros y una serie de motores de entre 9 a 13 litros de cilindrada, con un rango de potencias que van desde los 280 a 370 caballos de fuerza en normativas Euro 5 y Euro 6, capaces de consumir -según la especificación- desde diésel convencional en varios tipos de gas o  biodiesel, con posibilidades de configuración 4×2 y 6×2. 

 

El foco en la seguridad de los pasajeros y operador, depende de la integración de un sistema avanzado de asistencia a la conducción (ADAS 2.0), que está específicamente seteado para la operación urbana, de esta manera es capaz de detectar ciclistas y transeúntes desde sus laterales, dominar los puntos ciegos y ofrecer una mejor integración no sólo in situ, sino con toda la flota urbana gracias a sus avanzados sistemas telemáticos que permiten medir la eficiencia, seguridad y cómo el conductor realiza su labor. 

Por otro lado, las variantes de buses para larga distancia, contemplan motorizaciones con niveles de emisiones entre Euro 5 y Euro 6, que van entre los 320 caballos de fuerza, hasta los 500 HP, para larga distancia en servicio premium. 

Las exigencias de larga distancias -y las carrocerías asociadas- distan mucho del servicio urbano y por ello, el ADAS 2.0 programado para estas aplicaciones ponen más el énfasis en el control adaptativo de crucero, la vigilancia activa de cambio de carril y los sensores que permiten detectar cansancio o distracción por parte de los operadores, situaciones vitales en viajes de larga distancia. 

 

Ambas soluciones cuentan con un chasis capaz, en su variante 6×2, de un eje trasero direccional que funciona de manera inteligente priorizando su uso en espacio reducidos, y en maniobras de estacionamiento con un límite de 40 km/h para su activación. 

Los pedidos de esta nueva generación de buses, Scania Novali comienzan para Chile durante marzo de 2023, y la producción se encuentra al máximo para surtir y dar soluciones de nueva movilidad, sin jugar en un escenario tan disruptivo.